La Dirección Ejecutiva Nacional es un cargo de exclusiva confianza del Fiscal Nacional, la segunda autoridad del Ministerio Público, debiendo desarrollar en el ámbito interno organizacional, todas las instrucciones y directrices que mandate la máxima autoridad.
En el ámbito de la gestión estratégica, lidera el desarrollo del Plan Estratégico Institucional, y el cumplimiento de la visión, misión y valores organizacionales.
Es responsable de liderar y supervisar toda la actividad estratégica, administrativa y financiera de la institución, el uso criterioso de los recursos y la coordinación con las direcciones ejecutivas regionales. Es por ello, que supervisa las áreas funcionales representadas por las Divisiones de Personas, Finanzas, Contraloría Interna, Informática, Estudios y Atención de Víctimas y Testigos.
Asimismo, se encarga de tomar las decisiones para el cumplimiento de los objetivos y el desarrollo de planes de acción que permitan alcanzarlos, a fin de generar un crecimiento organizacional sostenido a través de los procesos operativos.
Otro de sus roles es encabezar la relación directa y operativa con las entidades gremiales internas, junto a la División de Personas.